Alarcón estructura medieval
Alarcón está situado a 87 km. al sur de Cuenca. Se encuentra regado por el río Júcar que forma el embalse conocido como Pantano de Alarcón. La Villa se halla río abajo del pantano teniendo, a sus pies, la pequeña presa de Hendideros.
En un cerrado meandro del Júcar se yergue el promontorio sobre el que se asienta la localidad.
Históricamente cuenta con antecedentes íberos y romanos, pero este poblado entra en la historia tras ser ocupado por los árabes, a quienes debe su nombre, alarcón era el término equivalente a 'la fortaleza' y fueron los árabes también quienes se encargaron de la construcción del primitivo castillo del que deriva el actual.
La historia de Alarcón está ligada a la de su castillo y viene determinada por su condición de plaza fortificada. No obstante, no es el castillo el único valioso elemento de su patrimonio monumental; cuenta también con una variada arquitectura, tanto religiosa (iglesias de Santo Domingo de Silos, de San Juan Bautista, la Santa Trinidad, Santa María del Campo, y la ermita de Santa María de la Orden), como civil (el ayuntamiento, la Casa de Villena y el palacio de los Castañeda).
La Villa de Alarcón está declarada Conjunto Histórico-Artístico, habiéndose aprobado la delimitación del Entorno el 3 de julio de 1981.
Entre sus monumentos cabe destacar, la Iglesia de Santo Domingo de Silos del siglo XIII y construida en estilo románico tardío. Conserva de su trazado original el ábside semicircular que remata su única nave y la portada que se abre en el lado meridional. Se trata de una portada abocinada con tres columnillas encapiteladas en cada jamba sobre las que descargan sendas arquivoltas apuntadas de diseño protogótico. En el siglo XVI, siguiendo los esquemas renacentistas, se levantó la torre de planta cuadrada y se elevaron los muros de la nave. En época barroca se modificó el sistema de cubrición dotándola de una bóveda de cañón reforzada por arcos fajones. Actualmente se utiliza como sala de exposiciones y auditorio, para lo que se ha acondicionado debidamente. Fue declarada Monumento Nacional el 19 de febrero de 1992.
Centro de arte pintura mural de Jesús Mateo. Antigua iglesia de San Juan Bautista. La construcción actual data del siglo XVI y sustituyó a otra de estilo románico. Posee una sola nave cubierta con bóveda de cañón, una portada de Juan de Herrera y una torre que ha perdurado de la primitiva iglesia. En 1994 el joven pintor español Jesús Mateo inició el proyecto de cubrir la totalidad del antiguo edificio con un conjunto de pinturas murales. Esta obra contemporánea cuenta con el patrocinio oficial de la UNESCO desde 1997 por su alto interés artístico mundial. Está considerada como una de las alta cimas del arte contemporáneo mundial.
La Iglesia de la Santa Trinidad, es una construcción de planta rectangular con dos naves, una del siglo XIII y otra del siglo XVI, aunque la bóveda de la nave más antigua es del siglo XV. Destacan en ella los arcos fajones y formeros apuntados, un arco triunfal de entrada al presbiterio, y un altar renacentista. La portada es típicamente plateresca. La torre se levanta sobre el llamado Arco de la Villa. El ábside actual es rectangular y sustituye a otro románico circular.
Iglesia de Santa María
Este templo cumple en la actualidad funciones de parroquia. Se erigió a principios del siglo XVI en estilo plateresco con bóveda de tracería al modo gótico. La portada es de mediados de ese siglo y se debe a Esteban Jamete de Orleans, el mismo que debió realizar el retablo con escenas de la vida de la Virgen y la sacristía.
Priego: Ciudad eterna
Priego es una de esas ciudades que se suponen eternas porque se levantan en el lugar exacto, en el centro de un paisaje que merece ser habitado.
Nos hallamos en el noroeste de la provincia de Cuenca. Priego se debate entre su vocación alcarreña y serrana desde sus orígenes, si bien ahora su vocación vigilante es una invitación a la aventura de adentrarse a través del Estrecho de Priego, verdadera puerta de entrada de la Serranía Alta, donde el río Escabas se desploma en rápidos y cascadas rodeado de zonas altas emboscadas de boj, encinas y pinos. Al oeste se dibujan las alcarrias, de olivos y viñedos y las vegas, de huertas y mimbreras.
Nos hallamos en el noroeste de la provincia de Cuenca. Priego se debate entre su vocación alcarreña y serrana desde sus orígenes, si bien ahora su vocación vigilante es una invitación a la aventura de adentrarse a través del Estrecho de Priego, verdadera puerta de entrada de la Serranía Alta, donde el río Escabas se desploma en rápidos y cascadas rodeado de zonas altas emboscadas de boj, encinas y pinos. Al oeste se dibujan las alcarrias, de olivos y viñedos y las vegas, de huertas y mimbreras.
El río Escabas y su afluente el Trabaque cruzan las tierras cultivadas de mimbre que, a finales de noviembre, forman un extensa alfombra de color púrpura ofreciendo uno de los espectáculos cromáticos más hermosos de la geografía española. Ambos son tributarios del Guadiela, y conservan el recuerdo de los gancheros, que conducían sobre sus aguas las maderadas de la sierra. Estos recuerdos permanecen en la memoria colectiva al lado de otros muchos que subsisten, más o menos vivos, en la realidad, como el cultivo y artesanía del mimbre, la recolección de la miel, el trabajo del barro, etc.
El Río Escabas bordea el farallón rocoso en cuya elevación se encuentra el casco urbano de la población pero no los puentes de acceso a la misma.
ARTESANIA:Priego es ciudad de artesanos, artesanos del mimbre y sobre todo de la cerámica. Esta última, de merecido renombre a nivel mundial, data del siglo XVIII cuando existían numerosos hornos en los que se cocía el barro, entonces con una finalidad claramente utilitaria, pues eran de barro la práctica totalidad de los utensilios de uso cotidiano del hogar. En la actualidad hay varios artesanos que continúan desarrollando su difícil labor adaptando sus productos a las necesidades actuales del mercado pero continuando produciendo esas primeras piezas de barro de uso hogareño.
Priego destaca también por la presencia de molinos hidráulicos. Los sitios donde se ubican eran y siguen siendo verdaderos paraísos, como todos los de la ribera del Escabas. Cabe mencionar el molino El Parral, de la Peña, de los Barrales, de Catalá, de Don Juan, del Estrecho. Su visita nos deparará gratos momentos que nos retrotraerán a momentos pasados pero de una intensidad y un olor especiales.
HISTORIA:
Priego tiene sus orígenes en la celtíbera Complega, importante ciudad fundada allá por el 250 a. de C., a unos dos kilómetros al oeste del actual casco urbano, en la denominada Vega Cesma. Ya en el siglo XVIII, existía la creencia de que los vecinos habrían venido a instalarse al abrigo del Señor de la Villa cuando se despobló Cesma, hoy vega con ese nombre.
A orillas del río Escabas podemos encontrar restos de las civilizaciones que han dejado su huella: íberos, romanos, visigodos, árabes.
Priego nos descubre rincones y parajes que merece la pena conocer. Conserva un casco urbano en muy buen estado. La vida gira alrededor de la Plaza Mayor desde la que parten las calles con trazados muy sugerentes. Es un autentico placer pasear por sus calles y adentrarnos en esa mágica atmósfera casi medieval que se respira en ellas. Nos podemos encontrar arcos de medio punto, casas blasonadas, ventanas de sillería. Merece la pena destacar el Palacio de los Condes de Priego (Siglo XVI), El Convento de San Miguel de la Victoria (Siglo XVI), El Convento de Nuestra Señora del Rosal que conserva un magnifico claustro renacentista, El Torreón de Despeñaperros (Siglo XIII)
NATURALEZA:
Priego se encuentra rodeado de naturaleza, unas veces exuberante como es el Estrecho de Priego, otras veces apacible como en los alrededores del Convento del Rosal presentando una variedad paisajística de primer orden así como una gran abundancia de flora y fauna. En lo relativo a la fauna cabe destacar una gran colonia de buitre leonado, águilas reales, halcones peregrinos, mochuelo común, perdiz, trucha etc. En cuanto a la vegetación existente hay también una gran variedad y riqueza, con grandes formaciones de matorral bajo y pinares, encinas y una extensa gama de plantas ligadas a la vegetación de ribera y a las grandes rocas de la zona, como el rosal silvestre, el enebro, la madreselva y plantas aromáticas como el espliego, el romero, el tomillo etc.
Merece especial atención el llamado Estrecho de Priego. El río se sumerge directamente entre poderosas paredes rocosas de verticalidad inaccesible. El agua ofrece una extraordinaria variedad de matices y colores, predominando el verde esmeralda ayudando a impregnar a este paraje de un sentido mágico que incrementa su esplendorosa belleza con una especie de encanto enigmático.
Priego es también cuna de personajes ilustres de reconocimiento mundial, entre los que cabe destacar al diseñador de moda Eduardo Ladrón de Guevara, al ciclista ganador del Tour de Francia Luis Ocaña, y al poeta Diego Jesús Jiménez.
Ahí, donde termina/ la alta Alcarria, empieza el pino, hacen cuesta/ las viñas, nacen sin esperanza/ los centenos; ahí/ donde se oye sobre la piel el canto/ de los grajos, está mi pueblo.//
Lugar donde la noche se hace/ desfiladero, sombra,/ cañada…//
Rondan las herramientas/ mi corazón. Duermen las hoces/ por mi sangre.//